Agradecimiento y pesar son los dos sentimientos que se percibían el lunes, 15 de julio, en la comunidad parroquial de Santa Rosa de Lima, en la despedida a la Hermanas Pasionistas de San Pablo de la Cruz.
Después de más de 40 años de vida y de servicio en la Diócesis de Málaga, nuestras hermanas se despedían, con pesar y definitivamente, de esa tierra querida en la que han compartido con tanta gente las diversas misiones que han realizado a lo largo de estos años. Comenzaron en el Teléfono de la Esperanza y el piso de acogida, y fueron desarrollando otras como la Guardería Santa María Goretti y la labor pastoral en diversas parroquias de Málaga capital y de la provincia.
El párroco D. Miguel Vega, en nombre de todos los componentes de la parroquia, mostraba su agradecimiento a las Hermanas María Jesús, Mari Cruz e Irene por el servicio prestado a la Diócesis y a la Parroquia en diferentes apostolados.
Al agradecimiento por todo el bien que han hecho se unía la oración, recordando especialmente a San Pablo de la Cruz y a la Venerable Mª Magdalena Frescobaldi, a quienes pedían que intercedan por ellas ante el Señor y les sigan acompañando en el nuevo destino.