El 23-02-2019 nos hemos reunido en Claret, en la plaza de Corazón de María de Bilbao, las comunidades cristianas del barrio de San Francisco. En este encuentro y, con el deseo de que nuestra experiencia de encuentro con el Señor siga estando atravesada por la realidad que nos interpela y nos confronta tantas veces, se han tenido en cuenta las sugerencias que se hicieron en la reunión anterior, que eran:
- Conocer más de cerca la vida y subrayados de cada una de las comunidades.
- Realizar un lectura creyente compartida de la realidad de nuestros barrios.
Hemos compartido ideas como: el cuidado de la dimensión orante y de la fe, misión más específica de la comunidad, acciones o implicaciones concretas, retos de la comunidad, propuestas de relación o intercambios con otras comunidades.
Este es un barrio de «gritos» «personales, sociales, reivindicativos políticos. Mucha gente se halla al margen del camino, hay barreras estructurales: personas sin empleo, sin papeles, necesidad de una espiritualidad y experiencia de Dios en las personas creyentes. Necesidad de vivir la fe (personas migrantes)
Además de los gritos se ve que también hay muchos «silencios» de quienes no puede hablar, la no existencia ni el reconocimiento.
Por todo esto, al acercarnos a estos temas, somos conscientes de su complejidad y de los posibles y variados enfoques y también de cómo nos interpela esta situación.
De este encuentro han salido varios retos y propuestas:
- Diálogo intercultural e interreligioso.
- Invitación a otras personas a colaborar.
- Una espiritualidad encarnada, ¿Cómo darle vida? ¿Cómo dejarnos empapar?
- Cultivo de la interioridad (compartida). Espacio inter-confesional religioso/de escucha
- Dimensión profética: Justicia más paz, propuestas
- ¿Cómo acoger atender a los/as últimos/as, ser signo, mantener la esperanza
- Adaptarnos a las necesidades
- Tener una voz propia como creyentes (en el barrio, sociedad, diócesis…)
Y hemos quedado en crear una comisión.
Ha sido también un encuentro intenso en el que se ha visto que queremos responder a los actuales desafíos y creemos que es responsabilidad de toda la comunidad, de todas y todos los que nos sentimos miembros de esta Iglesia.
De nuestra comunidad pasionista han participado en este encuentro de barrio las hermanas Marije Calvo y Bibiane Abetu
Hemos concluido el encuentro con una comida fraterna.