El pasado martes 2 de abril realizamos nuestra jornada cultural “Caminando hacia el futuro”/“Etorkizunari begira”, un espacio que propicia el intercambio de experiencias, nos acerca a la realidad de la población migrante, y sobre todo nos permite identificar acciones para la construcción de futuro.
Este año bajo la modalidad de world café emprendimos un viaje el equipo, voluntarixs y participantes de Hargindegi, compartiendo 80 personas alrededor de la mesa y la palabra acerca de las migraciones.
Este viaje se construyó en 3 momentos articulados por una serie de preguntas:
.– Antes: ¿Cuáles eran nuestras expectativas al llegar?
El punto de partida de quienes han decidido migrar responde a un sueño de futuro, cuya búsqueda tiene el objetivo de mejorar su calidad de vida, aprender de nuevas culturas, formarse, encontrar un trabajo, y brindar nuevas y mejores oportunidades para sus familias e hijos tanto si se encuentran con ellos como si viven en sus países de origen.
.- Durante: ¿Qué he traído de mí país?, ¿Qué me aportan las personas de este país?, ¿Qué me gustaría que me aportaran?
Las personas migrantes aportan su cultura, tradiciones, idioma, gastronomía, habilidades y quehaceres. Desean encontrar hospitalidad, solidaridad, cuidado, afecto y amistad; también apertura, buen trato, igualdad y trabajo que les permita mejorar su situación legal para hacer una vida mejor.
.- Futuro: ¿Cómo podemos integrarnos?, ¿Qué soñamos para nuestras hijas e hijos?, ¿Qué representa Dios en nuestras vidas?
La generación de alternativas representa un trabajo conjunto entre quienes somos de aquí y quienes hemos migrado, demandando cambios para romper estereotipos, racismo y desconfianza. Ello, lo podemos alcanzar mediante la integración cultural, el conocimiento e información, y la adopción de nuevas regulaciones, que a futuro nos permitan a nosotros y a nuestros hijos alcanzar una buena vida entendida como cuidado, educación, salud, seguridad y trabajo.
De manera transversal Dios, fe y/o espiritualidad se encuentran en el centro, representando como un “todo” que brinda guía, protección, bendición y ayuda; y quienes encuentran a Dios en las personas como escucha, apoyo y compartir.
Caminando hacia el futuro representa nuestra apuesta colectiva para contribuir a la construcción de proyectos de vida, pero sobre todo representa la integración de quienes somos de aquí y quienes han decidido caminar con nosotros aquí.